EXTRAIDO DE LA REVISTA “LA VOZ DE CUENCA”
(año 1. Nº 5. Octubre de 2007)
“Corría el año de 1987 cuando unos pocos locos decidimos probar en nuestras carnes que era eso del TEATRO. Desde entonces hasta ahora muchos han sido los actores y actrices que han participado en nuestras numerosas actuaciones, tanto dentro como fuera de nuestra región. Un trabajo que siempre hemos desarrollado pensando en el publico y en la gran recompensa que supone para nosotros su aplauso final”
Son ya mas de 20 años los que cumple el Taller de Teatro “ENGATOS”, dos décadas en las que han realizado todo tipo de representaciones, tanto para público adulto como infantil. Destaca en su repertorio: “La Gran Borrachera del Mundo”; con la que obtuvieron el 2º Premio Nacional de Teatro Contemporáneo Almagro 1989, o “Bocasana”, una representación de carácter didáctico-infantil con la que recorrieron todo el país.
“ENGATOS” es una compañía abierta al dialogo y a la cooperación con otros grupos como “LEBOTA” o “I PIAU”.
En su hacer destaca la creación y coordinación de la desaparecida Escuela Provincial de Teatro “El Juego de la Expresión”, así como distintas participaciones en diferentes rodajes de cortometrajes.
Desde la compañía destacan que no han parado a lo largo del tiempo que llevan haciendo teatro y que solo lamentan un detalle y es que cada vez cuesta mas trabajo encontrar personas que quieran dedicarse a este noble arte. Las razones de esta situación responden, según germán Olivares, al escaso apoyo de las instituciones, “no han sabido valorar el teatro como se merece”. Y para muestra Germán nos ofrece este botón: “en el año 1988 existían en Cuenca capital cerca de 11 compañías (solo hay que observar el programa “TALIA” de dicho año) . Ahora apenas quedan 3 o 4, sustentadas gracias a la cabezonería de unos pocos amantes de este arte que todavía aguantan desde entonces”…
… “ENGATOS” representa el espíritu de Cuenca, la pasión por llevar al corazón de los visitantes y de los propios conquenses parte de su historia, de sus leyendas y de sus monumentos; y todo a través del lenguaje verbal y del no verbal, en definitiva a través del apasionante mundo del teatro “hecho en la calle”, TEATRO hecho con mayúsculas
